¿Sientes o PIENSAS que sientes?

¿Sientes lo que sientes o lo sientes porque lo piensas? Parece un trabalenguas pero no lo es.  Después de leer y entender la frase me gustaría virtualmente dejar un espacio de silencio profundo, para que una vez procesada la pregunta os diérais el tiempo necesario para contestarla con honestidad…… ¡es tan importante!……. como averiguar en cada caso cuando y hasta que punto nos auto engañamos.

La mente, esa maravillosa herramienta que cumple a la perfección con su cometido, con tanto poder que a veces nos hace confundir lo que realmente somos con lo que simplemente pensamos. Hay muchos pensamientos iguales, cualquier pensamiento que hayas podido tener lo han tenido igual muchímas personas con una misma educación o cultura, porque solo hay tres o cuatro formas racionales de estructurar la información, sin embargo, nadie ha sentido como tú una misma experiencia. LA MENTE NOS HOMOGENEIZA, EL SER NOS DISTINGUE.

La mente es un instrumento a nuestro servicio, está para servirnos a nosotros y no para que nosotros la sirvamos a ella. Esta es la gran diferencia entre sentir que vives o  sentir que sobrevives, entre la libertad y la auto esclavitud. Si tu vida trascurre tratando de darla lo que constantemente te exige, la vivirás como una carrera de obstaculos en circulo, y agotad@, un día pararás para darte cuenta de que estás en el mismo sitio.

Este mundo es tan dual que le cuesta mantener el equilibrio en los terminos medios, pero ese es nuestro gran reto. Palabras como «problema», «fracaso», «conveniente», «deber», «inadecuado», «expectativas», «decepción» son el lenguaje propio de la mente, el mensaje que utiliza para codificar experiencias acordes con las creencias instaladas en sus registros consiguiendo que tu comportamiento produzca nuevas respuestas a esos códigos sutilmente interiorizados. Desinstalar esos códigos no es fácil, sin embargo el primer paso que es identificarlos no es tan dificil. La estrategia es convertirse en «el observador» de tu propia mente, separarte de ella, mirarla de lejos como un elemento externo a ti, como si no fuera la tuya, y después, recuperar la autoridad de apagarla y encenderla según  la necesites, que os aseguro es mucho menos de lo que nos han enseñado. Para esto es muy útil, como para todo, servirse de la visualización, imaginar cada pensamiento como un texto compuesto por frases que discurren en una pantalla como puede ser un televisor, y desde ahí separarse de la vivencia negativa que supone entrar en ellos. El control sobre el on-off es ya una cuestión solo de entranamiento.

En momentos de crisis es muy común la sensación de no saber quien eres realmente, confundir la persona con el personaje, no distinguir cuanto hay en nosotros de esencia y cuanto de creencia, si lo que sentimos es real o es nuestra mente la que nos lo muestra así. Si te paras a escuchar desde la observación verás que la voz mental es una voz con tono autoritario, perfectamente estructurada bajo las reglas sintácticas del lenguaje verbal, que tiene palabras para todo, que te habla y te mira a ti directamente como si te señalara con el dedo acusador. Su efecto es la ansiedad, la angustia y el miedo. En cambio, el Ser utiliza otro lenguaje, el NO VERBAL, no te «come la oreja» de día y de noche, su forma es suave y natural, utiliza tus gestos y onomatopeyas que salen de dentro al exterior de forma espontanea, suspira, se estira, se encoge, se recoloca, huye……. Por ejemplo, observate cuando algo te gusta, o cuando te disgusta, o en una determinada reunión o interelación en que posición se coloca tu cuerpo, en que dirección tienes las piernas, si tus brazos están cruzados o abiertos, como de relajadas están tus manos……. ¡hay tanta información en él!, ¡nos dice tanto……! Este es el mensaje que estarás enviando realmente al exterior, el que trasmites a pesar de que ni tú ni los demás lo percibaís de forma consciente.

No vale la pena fingir o auto convencerte de sentir lo que interiormente sabes que no sientes, a la larga te sentirás mal contigo mismo y no habrás engañado a nadie. Así nada sale bien.

Empezar a distinguir entre lo que crees que sientes porque tu mente te lo dicta y lo que realmente ocurre dentro de tus capas más profundas, es esencial para el equilibrio, para que exista coherencia en ti, para que no tengas que estar pendiente o tens@ preocupado por lo que dices o haces, para sentirte seguro, para sentirte libre. Se tú mismo, y si quieres saber quien eres realmente apaga tu mente y escúchate, porque……. SOMOS LO QUE SENTIMOS NO LO QUE PENSAMOS.

Aquí os dejo una charla ofrecida el sábado pasado por el creador del Sistema del Diseño Humano (HDS), herramienta para el auto conocimiento y las relaciones o ciencia de la diferenciación. Es una conferencia con traducción simultanea al español realizada por Alokanand Diaz del Rio, que pertenece a la primera sesión introductoria de una serie de cuatro impartidas de forma gratuita, en la que Ra Uru Hu habla sobre la ilusión de la mente. Escuchar su contenido produce un efecto similar al de una meditación, la información y la voz del traductor tienen la combinación perfecta para llevarte sin esfuerzo hasta una profunda reflexión. No os quepa duda de que merece la pena dedicar una hora para su audición.