Una y otra vez pasamos por alto el lenguaje, en muchas ocasiones si nos paráramos en la misma morfología de las palabras tomaríamos algo más de consciencia sobre lo que nos pasa. Todo está delante de nosotros pero el deseo de lo futuro no nos deja ver lo que en ese momento hay a nuestro pies. Desorientado/a, perdida/o, sin horizonte. ¿Por qué?.
Si después de mucho caminar en una dirección llegaras a un punto en el bosque, y te dieras cuenta de que no es ahí a donde tú querías llegar, ¿que es lo primero que harías? Si estando ahí no tuvieras claro cual de los caminos tomar, ¿te meterías por cualquiera de ellos dejandote llevar por los nervios o por la presión de lo que te dicen los demás? ¿Seguirías por el que toma la mayoría aunque tu intuición fuera en contra de esa dirección?, o……. ¿te pararías hasta que tu conocimiento, tu sentimiento y tu visión estuviesen claras?….. ¿prefieres ocupar el tiempo que sea necesario en tomar una decisión correcta para ti, o no te importa volver a perderte por las exigencias?…… Entonces, ¿no crees que el momento en el que te encuentras, por muy desorientado/a que estés, no es lo suficientemente importante, laborioso y eficaz, como para permitirte una gran «parada activa»? si-lo-que-haces-no-te-funciona
Y de nuevo la mente, una potente herramienta mal utilizada y por descubrir. Depende de lo que porte te llevará por uno u otro camino, y cuando te das cuenta de que la información o las creencias que se han ido archivando en su almacen no son realmente tuyas, lo que creías que era tu objetivo, tu horizonte, se desdibuja y te resulta imposible continuar. Te paras a reflexionar y te parece que nada ha servido para nada, una sensación de pérdida del tiempo vivido, de frustración, de desgaste inútil de energía, te bloquea. Lo que creiste que era importante para ti es quizás lo que menos necesitabas. Miras hacía delante y no hay motivación en lo que ves, miras hacia atrás, y no entiendes, ni siquiera sabes como llegaste hasta aquí.
Pues en contra de lo que puedas sentir, estás de ¡enhorabuena!, porque esto quiere decir que por fin te has parado y solo desde este punto tendrás la verdadera oportunidad para tomar consciencia, consciencia de tu presencia, de tu verdadero YO, la única posibilidad para que retomes las riendas de tu vida. Puede ser desagradable, puede crearte angustia, puede disparar tu mente en auto juicios, pero mantén la calma y sepárate de la emoción porque también esos juicios están creados desde los mismos archivos de creencias que te han llevado hasta ahora por ese camino equivocado, así pues, no todos son válidos para ti y deberás emprender la tarea de filtrarlos. Simplemente el hecho de responsabilizarte de haberlo permitido, de haberte dejado arrastrar por comodidad o por falta de consciencia, será un duro e imprescindible trabajo que deberás hacer. No se trata de culpabilidad sino de asumir y aceptar para poder transformar el error en aprendizaje. para-tomar-las-riendas-de-tu-vida-hay-que-hacerse-mayor
Si has llegado a este punto, estás en el tiempo muerto del partido, en el descanso, momento para parar, respirar, reposar lo jugado y analizar cada movimiento de la anterior parte. Para llegar a saber cómo y por donde continuar, el analísis en profundidad de las jugadas es aún más importante que el propio partido. Tómate el tiempo que necesites, es muy importante no volver a caer en la dinámica del juego ajeno, de ir sin saber en que posición debes mantenerte sin dejarte arrastrar por el movimiento del grueso del equipo solo por la presión de demostrar que puedes jugar, porque todos tus movimientos tienen sus consecuencias, cada uno tiene la responsabilidad de su posición única, y si no te permites el espacio necesario para sacar el aprendizaje correspondiente, la segunda parte será la repetición de los mismos errores de la primera, pero ya con un resultado final sospecho que insatisfactorio.
Por lo tanto, si en este momento de tu vida te has dado cuenta de que no estás en donde querías, de que no tienes lo que necesitabas, de que lo que tienes no te satisface, y por ahora, aún no sabes hacía donde debes enfocarte, no te preocupes y ocúpate en…
Desprenderte de lo que te pesa, de lo que hasta ahora llevas y no necesitas (creencias, relaciones insatisfactorias, compromisos inútiles, dependencias de todo tipo…) apegos mentales y materiales injustificados. estamos-de-limpieza-carta-introductoria
Descansa, procesa, duerme, juega, sueña, crea…… espera, porque el momento de la claridad llegará cuando estés preparado/a y ligero/a. Con cargas no podrás ir muy lejos. estamos-de-limpieza-soltar
No hagas caso a las presiones ajenas, cada uno tiene su propia posición en el juego, cada uno debe de realizar la suya. Solo tú marcas el ritmo, solo tú eliges. Al menos el 50% del contenido de nuestra mente pertenece a otros, no contiene nuestras propias reflexiones ni nuestros propios ideales, no dejes que también ella te presione porque es igualmente una presión ajena.
Si te has parado/a o estás siendo obliglado/a a parar, por muy perdido que te sientas aprovecha esta oportunidad para tomar lo que te ofrece, no tengas prisa, este es un tiempo precioso. Y si después de estar inmerso/a en este duro y vital trabajo aún crees que no estás haciendo nada, entonces dale de nuevo una vuelta a los esquemas mentales con los que fuiste domesticado/a y sigue limpiando lo que no sea tuyo, lo que no pertenezca a tu propia experiencia o a tu única manera de sentir. la-accion-del-no-hacer
-Que podemos hacer??
-Nada
-Bien, hagamos eso
Hola Natalia, gracias por leerme y escribir.
Tu pregunta es demasiado amplia para contestarla satisfactoriamente porque «la confusión» es solo un resultado de muchas cosas. Habría que ver que componentes se han ido sumando, localizar el origen de cada uno y repararlo. Imagina que me dices que el jardín de tu casa está amarilleando, con calvas, y que no sabes como salvarlo. Con ese ejemplo habría que analizar la tierra, el abono que le has puesto y que plantas son o no son adecuadas para ese terreno, si necesita más agua, más sol o todo lo contrario…….
De momento empieza por localizar, enumerar y delimitar por zonas especificas de confusión. Si me hablas de confusión de alma, me hablas de dolor.
Un abrazo muy grande desde la mía.
hola me hace reflexionar mucho , solo una duda que hago si aun no ve3o camino por cual ir y todo sigue confuso porque hoy estoy muy confundida y como simepre solo de alma …
Formidable, no tengo palabras. !Qué dificil es No hacer!
Felicidades por tus maravillosos artículos